Vivimos en la sociedad del cuento. De hecho, se nos suele juzgar precisamente por el número de cosas con la que contamos.
.Y Contamos con todo tipo de cosas
Contamos dinero y con dinero, contamos cuentos y con cuentos, contamos contigo y sin tigo, contamos números y con números, contamos gente y con la gente, (eso algunos, porque otros no cuentan con terceras personas para nada), contamos puentes y con puentes, tractores y todo tipo de artilugios.
En la televisión española, cuentan con el “Cuéntame” que te cuenta lo que quiere contarte cantando y cuenteando., no sé hasta cuando.Dime cuándo, cuándo, cuándo.
En fin, que hay cosas que se pueden contar, y otras que no se pueden contar, como por ejemplo los secretos inconfesables, aunque, algunos, paradójicamente, confiesan con fe fidedigna los secretos
Algunas cosas que se pueden contar, son de tipo fantástico, como, por ejemplo, los cuentos de hadas.
Otros cuentan o mejor dicho cantan odas, y otros cuentan con que no le molesten (no me “odas”)
Otras cuentos, son cosas completamente inútiles de saber, como los chismes de la gente famosa, famosilla y famosete, aunque a algunos/as les gusta y mucho.
Algunos/as devotos/as cuentan con las cuentas del rosario y esto no es nada irrisorio.
Y para no hacerte esta disertación demasiado larga, si quieres reírte un rato, cuenta con mi ayuda
Un saludo.
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