Jueves 13 de Mayo 2010 0:07 hora zulú
Os dejo esto que llegó a mi correo
ROMANCE DE LA EVALUACIÓN
La sesión de evaluación
dispuesta a empezar estaba
el tutor que era de Lengua,
dijo que todos callaran
y pidió a la Orientadora
que, por favor, se sentara.
La Orientadora, psicóloga,
tiene en propiedad su plaza
desde que la LOGSE impera
en los Centros de Enseñanza.
Sabe al dedillo la Ley,
habla la jerga bárbara
de los psicopedagogos
y de la fauna logsiana.
Comienza la evaluación,
las notas así se cantan:
Iván Peláez Borrego.
Con este mozo, ¿qué pasa?
A éste le quedan seis.
Titulación denegada.
Pero habló la Orientadora,
y de esta manera hablaba:
“No nos permite la LOGSE
hacer tan gran canallada
si algún alumno o alumna
no superase algún área
siendo con insuficiente
evaluado o evaluada
debe discutirse aquí
si es persona preparada
si domina las destrezas
los objetivos de etapa
si se ajustan los diseños
si se dan las circunstancias
si se hizo adaptación
al chaval o a la chavala
si de los procedimientos
se llevó relación clara
y si de las actitudes
quedó notoria constancia.
¿Detectáronse a tiempo
todas esas problemáticas?
¿Se hicieron formularios,
programaciones de aula?
¿Motivósele al efecto con
estrategia adecuada?
¿Hizose por el tutor
en la clase un sociograma?”
Muchos de los profesores
se miran, piensan y callan.
Hizose largo silencio,
ni una mosca se escuchaba.
Y luego el de Historia habló.
Bien oiréis lo que hablaba:
“¡Pero si este mozalbete
las más de las veces falta.
Y cuando viene, molesta,
grita, juega, se levanta;
no atiende al profesor,
ni estudia ni trabaja;
no se está quieto un momento,
de los profesores pasa,
es deslenguado soez,
torpe, necio y tarambana.
¿Cómo darle el mismo título
que al que se aplica y se afana
y saca muy buenas notas
y cumple normas y pautas?
Sería inicua injusticia,
sería indecente práctica,
sería de los calzones
hacerse la gran bajada.”
Los profesores se miran
y, con voz amortiguada,
se comentan a la oreja
las cosas que allí se tratan.
Los más parecen de acuerdo,
otros niegan y rechazan.
“¡Como podéis decir eso!”
Y la Orientadora exclama:
“¡No queréis tener en cuenta
la normativa aprobada!
¿Te has leído el plan de Centro?
¿Has repasado las páginas
de los valiosos Diseños
Curriculares de Etapa?
¿Practicas la evaluación
continua y bien adaptada?
¿No aplicas en tu clase
la enseñanza igualitaria?
Si el muchacho no te atiende,
será porque usas la práctica
de la lección magistral,
que es retrógrada y nefasta.
Debes dar motivación
y educación y enseñanza,
descender de la tarima,
que es plataforma tiránica;
debes ser más solidario
con chavales y chavalas,
darles menos contenidos
que no hacen mucha falta
y mirar sus intereses,
captar bien su idiosincrasia
y educar en valores
de sociedad democrática;
ser más tolerante y lúdico,
ser con ellos camaradas
y mostrarte comprensivo
en cada unidad didáctica.”
“Pero, aprobando a éste,
¿quién el título no alcanza?
Veremos el próximo curso
cómo vienen a las aulas
y cursar Bachillerato
así, por toda la jeta
un montón de analfabetos,
inútiles, vagos y caras.
Mozalbetes ignorantes
e iletradas muchachas
que no hacen ni la O
con un canuto de caña.”
Subieron las discusiones
arreciaron las palabras
se esgrimieron circulares
leyes, fueros y ordenanzas.
Hablose allí de principios,
de posturas reaccionarias
de los derechos humanos
y falta de democracia.
De lo divino y lo humano
todo el mundo allí hablaba.
Llevaban así tres horas
y el personal se cansaba,
hasta que un profesor dijo:
“A ver cuántas le quedaban
al mozo que, por el titulo,
la disputa originara.”
“Quedábanle seis”, responden.
“Pues yo, que doy Matemáticas,
que las tiene muy suspensas,
ahora están aprobadas
y solo cinco le quedan..”
Y la de Francés que estaba
mohina y entristecida,
a punto de echar las lágrimas,
dijo con voz melancólica,
mortecina y apagada:
“Ponle aprobado en Francés.”
“Que apruebe también la Plástica.”
(Sonó la voz del artista,
que tenia enormes ganas
de acabar las discusiones
e irse a pintar a casa).
“Pues yo, para no ser menos,
le apruebo Cultura Clásica.”
Y aprueba que te aprueba,
el typex se chorreaba,
sumergiendo los suspensos
bajo una patina blanca.
El tutor, los suficientes
prestamente rotulaba:
“Iván Peláez Borrego:
¡Quédanle dos, luego pasa!”
Y postlorín postlorado, post este post post se ha acabado
Post ea, ya está dicho todo post hoy
El resto es silencio
Feliz Jueves
ps. Cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia.
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!
PUES TIENES RAZON ES COMO LA REALIDAD¡¡¡
ResponderEliminarUN ABRAZO
Me agotò.
ResponderEliminarMe hiciste recordar
No tengo màs reuniones pesadas
Aleluya!
Besos energizantes
Simplemente (y ni mas ni menos) que GENIAL. Lo has clavado. besos
ResponderEliminarNo sé si ha salido el comntario anterior...me ha hecho un extraño. Bueno, pues que lo has clavado y bordado Rampy...como siempre. Bss
ResponderEliminary asi nos va en este país de burros..que pena...un abrazo...
ResponderEliminarPuede parecer extraño y exagerado, pero no, no lo es. En estos momentos se está evaluando a los alumnos de segundo de secundaria obligatoria de todo el país, con la intención de mejorar la enseñanza. Las estadísticas son acojonantes (cúanto uso últimamente esta palabra, joer)y solo espero que no se maquillen los resultados, porque si de verdad son lo que parece que serán, tendrán que hacer algo, aunque sospecho que las medidas serán del estilo a las que se aplicaron ayer contra la crisis. ¿contra la crisis? ja! contra el ciudadano de a pie. Crisis en todos los ámbitos: miedo me dan...
ResponderEliminarBesos, Rampy, tiempo sin pasar por aquí, ya vuelvo.
Pues digo yo que todos tienen su parte de razón. Tal vez en un punto intermedio esté la solución (jeje, se me escapó el pareado)
ResponderEliminarBesos
Buen romance, cercano a la realidad pero de maestros y alumnos y sistemas se podría hablar........
ResponderEliminarPor cierto vi tu entrada de aparcamiento en reader y cuando la iba a comentar, vi que no estaba....¿fallo tecnico?
Hoy me quedo con la sonrisa de este romance, gracias.
Un besazo
Nunca he amado la evalución,
ResponderEliminarsiempre me ha tocado un cojón,
Y ahora que lo pienso así en alto,
nunca he tenido un cojón,carajo!
Que complicado es ser profesor, pero que importante es para el alumno lo que en estas reuniones se evaluan, el trabajo de muchos meses... en el caso solo de algunos.
ResponderEliminarMuy bueno.
Besos.
Es lo que hay. La nueva y funesta plaga de nuestra educación: los pedagogos y psicologos, perdón, pedagogos y pedagogas, psicologos y psicologas.
ResponderEliminar¡Que Dios nos pille confesados (y confesadas)!
Gracias por pasar. Y enhorabuena por esta magnificiencia de entrada, es monumental, me encanta cada parte del texto lo has clavado. Saludos y abrazos.
ResponderEliminarMe parece indigno, injusto, etc... que por querer complacer se dejen pasar a los impresentables y porque la ley lo diga... Qué estamos fomentando: la vagancia, la mala educación, la incultura...
ResponderEliminarEs bastante realista el texto.
Rampy, gracias por publicarlo.
Besos.
genial del todo, como profesor no puedo sino aplaudirte jajajaja, Qué bueno, creo qyue yo también me voy a quedar, si me dejas, claro
ResponderEliminarTe has lucido Rampy. Se puede decir más alto pero no más claro. Pena de egresados, pena de futuro para ellos y para todos. Has escrito de manera magistral una gran, triste y dolorosa verdad.
ResponderEliminarMi admiración. Besitos